WEEKLY LETTER - the original easter
In our procession with the palms and the proclamation of the passion next Sunday we enter into the liturgies of Holy Week. It is the most sacred time of the Christian year. The celebration of the Lord’s resurrection, on what we now call Easter Sunday, is the first of the great feasts of the liturgical year. All other feasts are reckoned from that date. The apostles recalled the Lord’s resurrection on the first day of every week. It was the day when the disciples would gather to share the word and break the Bread. Sunday was the original feast of the resurrection, but after a number of years, it must have seemed only fitting to observe a special annual remembrance as well. The establishment of the date of Easter was a matter of no little debate in the early days, because it is not an anniversary date, it is a day of remembrance. It is the Passover of the Lord from death to life, and it is our passing over as well. The date of this remembrance was tied to the celebration of the Passover – a date that was determined according to the Jewish lunar calendar. It was agreed that the first Sunday after the first full moon after the vernal equinox, would be the annual day of remembrance of the Lord’s resurrection. It is important for us to express that Easter is not so much a re-creation, as it is an expression of a new heaven and a new earth, made possible through the passion, death and resurrection of Jesus Christ, who made all things new. -F. Ted
CARTA SEMANAL - la pascua original
En nuestra procesión con las palmas y el pregón de la pasión el próximo domingo entramos en las liturgias de la Semana Santa. Es el tiempo más sagrado del año cristiano. La celebración de la resurrección del Señor, en lo que ahora llamamos Domingo de Pascua, es la primera de las grandes fiestas del año litúrgico. Todas las demás fiestas se cuentan a partir de esa fecha. Los apóstoles recordaron la resurrección del Señor el primer día de cada semana. Era el día en que los discípulos se reunían para compartir la palabra y partir el Pan. El domingo era la fiesta original de la resurrección, pero después de varios años, debe haber parecido apropiado observar también una conmemoración anual especial. El establecimiento de la fecha de Pascua fue motivo de no poco debate en los primeros días, porque no es una fecha de aniversario, es un día de recuerdo. Es la Pascua del Señor de la muerte a la vida, y es también nuestro paso. La fecha de este recuerdo estaba ligada a la celebración de la Pascua, fecha que se determinaba según el calendario lunar judío. Se acordó que el primer domingo después de la primera luna llena, después del equinoccio vernal sería el día anual de conmemoración de la resurrección del Señor. Es importante que expresemos que la Pascua no es tanto una recreación, sino la expresión de un cielo nuevo y una tierra nueva, hechos posibles por la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, que hace nuevas todas las cosas. –P. Ted